Antonio
Castilla López, ingeniero, pionero de la radio en España. Nació
en Jerez de la Frontera (Cádiz) en 1886 y murió en Madrid en 1965 a
los 79 años de edad.
Fue
un adelantado de su época, considerado junto al también andaluz
Matías Balsera, iniciador de la radio en España ya que fue el
fundador de la primera emisora en nuestro país Radio Ibérica, luego
conocida como EAJ1 Radio Barcelona.
Familia
Su
padre era Manuel Castilla, maestro y con intereses en sector
del vino de Jerez, y su madre Rosario López. Contrajo
matrimonio, en Barcelona, con Mercedes Rovira y Roig; de este
matrimonio, que se malograría más tarde, nació su hija Rosario
Castilla Rovira. Antes de fallecer legalizó sus segundas nupcias
con María Asunción Ruiz Pérez, de esta unión tan solo sobrevivió
un hijo.
Formación
En
sus primeros años de educación en Jerez el joven Castilla ya
vislumbraba una inteligencia viva y despierta. En 1910 con 24 años,
se trasladó a Madrid donde continuó su formación para ampliar sus
conocimientos técnicos. Estudió en la Escuela Oficial de
Telecomunicaciones, realizando viajes al extranjero como a Francia,
Inglaterra y Estados Unidos.
En
Estados Unidos obtuvo el título de ingeniero en radioelectricidad,
llegando a colaborar con el mismo Lee de Forest (1873-1961),
considerado el padre de la radioelectrónica e inventor del triodo.
Inicios
profesionales
Hacia
1900, inició su amistad con Matías Balsera considerado el primer
radioaficionado español. Castilla será su “eficaz discípulo”,
y en “muchos aspectos le superará”, como cuenta el periodista y
profesor Antonio Checa en su “Historia de la Radio en Andalucía”.
Iniciativas
técnicas
Entre
1904 y 1908 acompañó a Balsera en una serie de experimentos para la
puesta en práctica de un invento para el control de la navegación
de torpedos, contando con el apoyo de la Marina de Guerra alemana que
había mostrado su interés en el proyecto.
Técnicas
radiofónicas
Cuando
regresó a España en 1916 trabajó en varios proyectos estatales
como fueron la creación de varias emisoras de radiotelegrafía
situadas en Madrid bajo titularidad estatal: la de la Marina de
Guerra, la del ejercito y la del Palacio de Comunicaciones, ésta
última considerada como un modelo para otros países europeos. Otro
hecho relevante fue la comunicación por radioteléfono entre Madrid
y el Pardo, mediante transmisores construidos bajo su dirección.
Compañía
Ibérica de Telecomunicación
1917
fue un gran año para este jerezano. Con el apoyo de socios
capitalistas de Bilbao constituyó en Madrid la Compañía Ibérica
de Telecomunicación, la primera que estableció la industria de
Radio Electrónica, fabricando los primeros tubos electrónicos y los
equipos transmisores y receptores hechos en España.
Se
le encargó suministrar equipos de radiodifusión al ejercito y a los
radioaficionados. Teniendo que vencer en muchos momentos los
problemas de la falta de material para la fabricación de válvulas.
La fuerte competencia internacional y la necesidad de disponer de
recursos para la fabricación en serie de sus componentes le abocó a
fusionarse en 1924 con La Radiotelefonía Española, de capital
hispano-francés.
Éxitos
tecnológicos
Dos
hitos tecnológicos suyos destacan sobre los demás en esta época:
consiguió mantener al rey, Alfonso XIII, comunicado en
el yate Giralda con tierra durante una travesía por
el mar Cantábrico, y equipó con los nuevos aparatos de comunicación
a los barcos de la Compañía Isleña Marítima. El Jaime I, en su
viaje a Palma de Mallorca, mantuvo perfecta comunicación con el
puerto de Barcelona por telefonía sin hilos, siendo la primera vez
que esto se realizaba en España.
Productos
Iberia
En
1922 su fábrica que estaba instalada en el Paseo del Rey de Madrid,
producía también micrófonos, y a finales de 1923 salieron al
mercado los famosos receptores de radio de la marca Iberia.
Radio
Ibérica
1923
fue el año que se iniciaron lo que está considerado oficiosamente
las primeras emisiones de la primera Radio en España, Radio Ibérica,
creada por Antonio Castilla, pero que por cuestiones burocráticas,
se concedió el privilegio de ser considerada la primera emisora de
España y que recibirá el indicativo de identificación de EAJ 1 a
Radio Barcelona que empezó a emitir en 1924.
En
un principio la programación de Radio Ibérica se basaba en
programas de música en directo, conferencias culturales e
información del tiempo, para más adelante ofrecer boletines de
noticias, conciertos y apartados infantiles.
EAJ
4
En
un intento por remontar la crisis y buscar su lugar en el sector
radiofónico construyó y gestionó él mismo en Madrid, Radio
Castilla, EAJ 4, que inició sus emisiones el 19 de octubre de 1925.
Las instalaciones fueron inauguradas por el mismo general [[Miguel
Primo de Rivera]]. Tanto el dictador como el terrateniente y político
jerezano, Francisco Moreno Zuleta, Conde de los Andes, favorecieron
los proyectos de su paisano. Antonio Castilla revolucionó la
radiodifusión europea con la introducción de las válvulas De
Forest, que creó para la emisora EAJ-4 en Madrid.
Debido
a las dificultades económicas que sufrió la emisora en este tiempo
fue transferida en 1927 a la órbita de la cadena Unión Radio,
formada mayoritariamente por las sucursales españolas de las
poderosas empresas extranjeras, siendo readjudicado el indicativo
EAJ-4 a Radio Galicia.
Anuncios
de neón
Castilla
creó una empresa para la fabricación de anuncios de neón, una
novedad en esos tiempos, del que destaca el que se instaló en la
Puerta de Sol de Madrid para el símbolo del Tío Pepe de las bodegas
González Byass.
Divulgación
Un
gran éxito en su vida profesional fue la conferencia que con el
título de “La Física del tubo Electrónico” impartió en 1920
en el Paraninfo de la Universidad de Valencia. La finalizó con la
retransmisión de un concierto desde el Palacio de la Exposición,
escuchado a través de un solo receptor por un numeroso público.
Final
de etapa
Antonio
Castilla fue un hombre de una enorme fuerza de voluntad, y a finales
de la década de 1950 se volvió a hablar de él debido a la
invención de un sistema de señales eléctricas sin conductores, que
se utilizará con éxito en la circulación por carretera. En los
últimos años que estuvo activo trabajó para la empresa Standard
Eléctrica.
Antonio
Castilla fue un hombre que trabajó para incorporar a nuestro país
en el desarrollo de las nuevas tecnologías de la comunicación a
distancia, y que fue víctima, como otros muchos visionarios de
nuestro pais, de la incomprensión de los propios españoles
como de los intereses económicos de países extranjeros, a
través de sus filiales españolas, en el campo emergente de la
industria tecnológica de la comunicación sin hilos.
Reconocimientos honoríficos
Reconocimientos honoríficos
- En la ciudad de Jerez hay una calle con su nombre
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